Caña de azúcar, el nuevo elixir de la eterna juventud

Hace unos meses, en uno de esos días de frío glaciar, recuerdo que la TV estaba pasando un reportaje sobre la longevidad. El programa no era muy riguroso. Se limitaban a poner algunos ejemplos de personas longevas de varios países y explicar lo que ellos consideraban el secreto de su envidiable salud. Un anciano de Taiwán hacía flexiones con la energía de un chaval de 20 años, auqnue le quintuplicaba la edad. Un matrimonio de Estados Unidos estaba convencido de que comer nueces todos los días, y a todas horas, es lo mejor de lo mejor. Una japonesa camino del centenario decía que lo mejor era tener un espíritu tranquilo y contemplar su jardín, lejos de cualquier estrés. Y luego se fueron a Cuba.

No, no es orina. El color es igual pero el sabor es más dulc... ups.

Y en Cuba, hogar de la revolución, había unos ancianos bebiendo un extraño mejunje mientras miraban sin disimulo la baja espalda de una mulata que pasaba por allí. Después explicaron que esa bebida era jugo de caña de azúcar, y acompañaron al reportero a una plantación cercana donde un grupo de chavales cortaba cañas. Los muchachos chupaban más cañas de las que apilaban, y se veían lozanos y contentos. El elixir de la eterna juventud, decían.

Recuerdo haber comentado a Miyoung que, en ese preciso instante, debía haber varios miles de coreanos buscando "caña de azúcar" en Naver, y un par de decenas llamando por teléfono para traerse unos contenedores a Corea. Era broma. O eso pensaba, porque a veces las bromas se convierten en realidad.

Este verano, en cuanto el frío extremo dejó paso al calor infernal (no, no hay término medio), los puestos que antes vendían snacks calientes pasaron a vender bebidas frías. Lo de siempre, pero con una novedad. Aparte del timo de la limonada que ya comenté, también hay bastantes puestos de caña de azúcar. Y esto sí que es una novedad absoluta.

Diversificar el negocio: vender limonada y jugo de caña.

La bebida cuesta 2.500 won por una bolsita. Es dulce, muy dulce, pero como se vende fresca y el calor aprieta se bebe fenomenal. No sé si hay alguna relación entre aquel programa y estos lodos, pero es una casualidad cósmica muy grande. Una bebida que refresca y mejora la salud, a ver ahora cuánto tardan las grandes empresas en sacar sus bebidas industriales de caña de azúcar artesanal cien por cien natural con un 5% de zumo.

En Corea hay dos formas infalibles para vender cualquier producto. Si es para mujeres, hay que "demostrar" que el producto rejuvenece. Si es para hombres, el secreto es convencerlos de que aumenta la potencia sexual. Volveré sobre esto último en breve, y ya verás lo que se puede llegar a vender.

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