Portugal, el vecino familiar
Para un gallego como yo, ir a Portugal no es difícil. De hecho, es más fácil que ir a muchos lugares de España. Al ir a Portugal no parece que se haya salido de España, ni siquiera de Galicia. Es cierto que el idioma es distinto, pero a los gallegos no nos resulta muy complicado entender el portugués (siempre y cuando nos lo hablen despacio). Hablarlo bien ya es otro tema, porque no es tan fácil el portugués como lo pintan.Yo nunca sentí una gran atracción por Portugal, las cosas como son, aunque sea el primer país extranjero que visité. Cuando era niño, fui alguna vez a Fortaleza y Valença, que es como no salir de Galicia. La tradición popular cuenta que en Fortaleza se compran toallas y muebles a muy buen precio. Lo de los muebles tiene su truco, porque son hechos con madera verde, que es más fácil de trabajar. Pero claro, al cabo de unos años, conforme la madera se va secando, el mueble se va retorciendo y pasa de estilo clásico a estilo post-modernista. En esta época de globalización lo de las toallas tampoco tiene sirve como excusa. Y tanto, como que ahora los portugueses van a comprarlas al Corte Inglés de Vigo.
Pasaron varios años hasta que volví a pisar suelo portugués. Lo hice cuando vivía en Santiago, con sendas excursiones a Oporto y Lisboa. Bueno, y las veces que usé el aeropuerto de Oporto, que se está comiendo a bocados a esa tricefalia aeroportuaria que los alcaldes gallegos se empeñan en mantener contra toda lógica. ¡Ah! Y que no se me olviden un par de viajes de trabajo a Viseu.
Centro histórico de Oporto. |
Puente 25 de Abril, de Lisboa. |
Algo que me llamó mucho la atención, tanto en Oporto como en Lisboa, fueron los barrios de casas abandonadas. En todas las ciudades hay zonas pobres y descuidadas, pero encontrarse calles enteras con edificios semiderruidos es algo que no me esperaba en una gran ciudad de un país como Portugal. Dan una cierta sensación de decadencia que empaña algo la impresión general de ambas ciudades, que es muy grata.
Plaza del Comercio, en Lisboa. |
Ahora que vivo en Asia me arrepiento de no haber dedicado más tiempo a explorar ese país vecino que es Portugal. La excusa de que es muy parecido a Galicia ya no me parece válida, porque he aprendido que muchas veces las mayores diferencias están en los detalles.
Interesantes reflexiones amigo. Lo cierto es que Portugal es un país muy interesante con muchas cosas por descubrir y con una gente muy amable. Lisboa es una de las ciudades más maravillosas que he conocido. Pero también deberías descubrir el resto de España, por ejemplo el sur por la zona de Cadiz, el Levante en el este o la zona de los Pirineos.
ResponderEliminarSaludos
Que razon tienes!! Yo soy de Salamanca y por tener Portugal al lado no le hice ni caso. Bueno, lo del viajecito a comprar toallas y demas, pero no mucho turismo. Ahora que vivo en Estados Unidos desde hace 13 años, me acuerdo de que tenia que haber explorado mas el territorio vecino.
ResponderEliminarEva
Queda claro que muchas veces obviamos lo que tenemos más cercano y accesible, y nos empeñamos en viajar lejos cuando también hay lugares muy interesantes la lado de casa.
ResponderEliminarGracias por vuestros comentarios :)
eso es así! XD
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