Tarjetitas sexys en las calles de Seúl
Un día, recién llegado a Seúl, regresaba a casa por la noche cuando algo captó mi atención en el suelo. Era una tarjetita de visita, pero con la foto de una chica semidesnuda y un número. Al principio pensé que podía ser una tarjeta de un juego de barajas sexys o algo así; pero no, el número era un número de teléfono y la tarjeta era una invitación al pecado. Desde entonces he aprendido que en Seúl las calles se cubren de estas tarjetas cada día al anochecer. Es como una especie de otoño sexual que ocurre a diario. Al final me acostumbré y dejé de prestarle atención...Hasta que un día, paseando con mi mujer por Gangnam, la situación era tan exagerada que incluso yo sentí vergüenza. El suelo estaba cubierto literalmente de estas tarjetitas, en la calle principal de Gangnam un domingo a mediodía. Había cantidad de familias paseando con niños pequeños, algunos de los cuales iban recogiendo las tarjetitas como si fuesen cromos de sus héroes del béisbol. Y las tarjetas no estaban colocadas solo en el suelo, sino también en las repisas y los bancos, para facilitar que los interesados las pudieran recoger discretamente.
Al final, yo también recogí un puñado de tarjetas para sacarles una foto y demostraros que el tema es real.
Ya había visto algo parecido en Londres, donde tienen la costumbre de decorar las cabinas de teléfonos con llamativas chicas enseñando las tetas en tamaño A5 (las tarjetas, digo), pero lo de Corea me choca muchísimo. Primero, porque en teoría está prohibida la prostitución, aunque luego está presente en casi cualquier calle en forma de barrios rojos, salones de masaje, moteles, pisos de chicas, KissBangs, Dabangs, Noraebangs, Bussiness Clubs y muchas otras formas más o menos discretas de burlar la ley. Y por si fuera poco, caminar mirando al suelo tampoco sirve para evitar la tentación, porque entonces aparecen las dichosas tarjetitas.
Otro motivo por el que me sorprendió tanto todo esto es porque en la sociedad coreana no se habla abiertamente de sexo. En teoría la gente es más retraída en ese aspecto. Incluso en la TV se practica la censura, recortando las escenas calientes de series y películas, y desenfocando cualquier pezón sobrante. Sin embargo, luego tenemos los grupos de K-pop enseñando carnaza en la tele a todas horas, la prostitución al alcance de la mano en casi cualquier calle, y una tasa de agresiones sexuales entre las más altas del mundo.
Son las paradojas de un país en el que sigue estando prohibida la pornografía, pero en el que para conseguir una bonita colección de tetas y culos no hay más que recoger papelitos del suelo.
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| Así de adornado estaba el suelo... |
Hace unos segundos en otro blog leí una noticia en la que se comentaba un tema relacionado a este.
ResponderEliminarLa cuestión es que guste o no, la prostitución esta presente en el día a día. Y ya pueden esconderlo todo lo que quieran y prohibirlo porque seguirá presente oculta en las sombras. Aunque podrían tener cuidado los repartidores de las tarjetitas, no es plato de buen gusto pasear con los críos y que vean esas cosas. :S Bueno, y sin niños. A mi no me gusta ver esa publicidad.
Y sobre lo que has comentado sobre los grupos de K-pop tienes toda la razón. Porque por un lado se escandalizan si hay alguna escena "caliente" en películas y series cuando los shows de muchos de los idols enseñan y calientan en muchas ocasiones el ambiente. Aunque en este punto, no niego que es algo que le gusta a la gente. ¡Doble moral! *o*
Vamos en tema del sexo los países asiáticos son ovejas cuando en su interior son lobos hambrientos.
Lo que si me ha sorprendido de todo esto, es que señales que hay unas altas cuotas de agresiones sexuales. Me choca aún más cuando he leído en blogs que Seúl es una de las ciudades más seguras. Me tendré que comprar un bote de pimienta en spray, el día que vaya de vacaciones, por si las moscas.
Saludos, Estefania. :)
Concuerdo con los comentarios de usted, el hecho de que prohiban ciertos vídeos y canciones y que sean muy cuidadosos el momento indicar en la tele escenas de besos y contacto íntimo pero a la vez como tu bien dices se encuentre libremente tarjetitas sexuales a plena de luz día, simplemente son una muestra de que a pesar de que Corea es un país avanzado en muchas áreas, todavía se encuentra en vías de desarrollo en otras y esto se debe al rápido crecimiento que ha sufrido esta sociedad. Sin embargo, a pesar de todo esto no podemos quitarle el mérito de que Corea sigue creciendo como un atractivo cultural.
ResponderEliminarSigue escribiendo.
Muchos saludos desde Francia!
Bueno es lo que tiene la represión sexual, aquí en España aunque yo no lo he llegado a vivir durante el franquismo se volvían locos con poca cosa, como cuando cruzaban la frontera para ver el "Ultimo tango en Paris", si a eso le añades el carácter asiático más recatado o tímido no es tan raro.
ResponderEliminarQue exista es inherente hasta el día de hoy al ser humano, y aunque alguna gente no lo crea los asiáticos también son seres humanos con sus miserias y sus virtudes.
Míralo por el lado bueno, un niño si se le enseña bien no va acabar traumado por ver una teta o un culo, aquí en España puede vera La Esteban o A Jorge Javier y eso si que puede marcarle de por vida.
PD: el indice de agresiones sexuales es realmente preocupante más aun cuando en otros aspectos la criminalidad es más baja.
@ Duke2706 No te falta razón sobre La Esteban o Jorge Javier, yo estoy traumatizada.
ResponderEliminarPor cierto, quiero hacer una aclaración. Cuando digo:
"Vamos en tema del sexo los países asiáticos son ovejas cuando en su interior son lobos hambrientos."
Quiero añadir que realmente muchas personas, no solamente asiáticos, son así. Que no quiero que exista algún tipo de malentendido. La frase recaía más en que en los países occidentales no existe el tabú que si existe en los asiáticos sobre el tema del sexo. Y de que, aunque no se hable de algo eso no quiere decir que no exista.
Saludos, Estefania.
@Estefania Está claro que los ídolos del hallyu saben muy bien lo que hacen cuando enseñan cacho, tanto ellas como ellos. Si al final venden más discos por los libretos llenos de fotos que por la propia música.
ResponderEliminarY no es que Seúl sea una ciudad insegura ni mucho menos. Simplemente, como los otros tipos de criminalidad son tan infrecuentes, llama más la atención la cantidad de crímenes sexuales, que están en línea con otras ciudades. Pero no tiene por qué pasar nada malo, es una simple cuestión de mantener una cierta precaución: no andar sola de noche por ahí y no confiar demasiado en otras personas. Igual que en cualquier otro sitio, vamos.
Lo que pasa es que alguna gente se cree que los coreanos son como en las telenovelas, y no. Son gente normal, buenas personas en su mayoría, pero eso no quita que haya gente mala en el medio, vestidos con piel de cordero como tú dices.
@Anonimo El atractivo cultural de Corea es innegable y no seré yo quien lo discuta, que vivo en el país y además trabajo para difundirlo :)
ResponderEliminarEstas cosas son un desajuste entre costumbres que vienen de muy atrás que contrastan con los nuevos hábitos occidentales que se imponen en la vida de la gente. Espero (y deseo) que en unos años el tema esté más controlado, porque ahora mismo está un poco desmadrado. Mucho por un lado y nada por el otro... hace falta encontrar el término medio.
@Duke2706 Bueno, lo de la telebasura es otro tema que daría para hablar largo y tendido. Por suerte aquí no hay programas tipo "La Noria", pero tampoco te creas que el nivel de la TV es muy alto. Yo directamente paso de verla.
ResponderEliminarY un último apunte: "no hay mejor forma de fomentar algo que prohibiéndolo". Esto está más que demostrado. En este caso, la negación del sexo puede acentuar ciertos comportamientos excesivos, que si se mostrase como algo más normal quizá no se darían.
Y gracias a todos por los comentarios :)
Sigue difundiendo porque como yo somos muchos quienes amamos y respetamos esa cultura!!!
ResponderEliminarPor supuesto que seguiré escribiendo, de Corea y de otros lugares, y tanto lo bueno como lo malo. Gracias por los ánimos!
ResponderEliminarEn el tema del sexo, muchos países asiáticos suelen ser muy hipócritas. Esa "doble moral" que comentáis. En Japón pasa tres cuartos de lo mismo.
ResponderEliminar@Alberto Sí, posiblemente en Japón sea incluso más exagerado en Corea. En ese aspecto los occidentales (o al menos los latinos) somas más naturales. Podemos hacer bromas sobre temas sexuales, sin que eso signifique que seamos unos obsesos ni nada parecido. En algunos países de Asia, sin embargo, hay mucha gente que no habla del tema, y después en privado hacen barbaridades (porque si no, no se explica que haya tantos lugares donde se practica la prostitución).
ResponderEliminarwoow1 es muy sorprendente ver las imagenes pero es de cierta manera doble moral porque pues si vez o alguien las recoje siendo su país como es bueno es un punto de vista pero si es realmente sorprendente yo no lo imagine pero pues quien sabe
ResponderEliminarCuando en una cultura el sexo se considera tabu por algún lado va a salir a flote el tema como los hoteles con habitaciones temáticas que si la hello kitty, que si la sadomasoquista o simplemente tirando tarjetas en la calle como las del artículo.
ResponderEliminarNo sabía q la pornografía estuviera prohibida en corea, curioso porque tengo entendido q es uno de los países que más consume pornografía y he visto ciertos programas donde se le pregunta a los invitados por ella, invitados jóvenes por cierto.
Y es que, normalmente, cuanto más se intenta reprimir un comportamiento, más se obsesiona la gente con eso. Y en este caso sucede con el sexo y la pornografía.
ResponderEliminarLo de la televisión es una simple manera de intentar pillar al invitado con preguntas morbosas, a ver si a la chica de turno se le escapa un "sí" donde todos esperan un "claro, que no".
Por razones de trabajo me tocó vivir en la Ciudad de Masan por 2 años, pequeño pueblo del interior pero grande en prostitución, esto se puede comprobarse facilmente en las adyacencias de las Discotecas durante los fines de semana.
ResponderEliminarEn Masan o donde sea, pequeño pueblo o gran ciudad, llama la atención hasta qué punto está socialmente aceptada la prostitución pese a estar prohibida (que no perseguida) por ley.
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